¿Conoces qué es el reto Net Zero y cómo conseguirlo con domótica?
Tras décadas olvidando a nuestro propio ecosistema, nos hemos dado cuenta. El descontrol en las emisiones es tremendamente dañino para el medio ambiente. Pero, afortunadamente, cada vez es más común encontrar iniciativas que fomentan la sostenibilidad y el cuidado del planeta, tanto para nosotros mismos como para las futuras generaciones. En estas líneas, precisamente, te explicamos una de las más conocidas: el reto Net Zero. ¿En qué consiste? ¿Cuál es su relación con la eficiencia energética? ¿Cómo puedes contribuir desde tu hogar o tu trabajo? ¿Qué papel juega la tecnología Smart?
¿Qué significa Net Zero carbón?
Para empezar, el concepto Net Zero carbón o carbono neutral es un desafío o reto planteado por los gobiernos nacionales para alcanzar un equilibrio entre las emisiones de dióxido de carbono (CO2) liberadas a la atmósfera y las que se eliminan de ella. Esto significa que la cantidad neta de CO2 liberada a la atmósfera debe ser cero.
Actualmente, la temperatura de nuestro planeta es 1,1 °C superior a la de finales del siglo XIX y el número de emisiones continúa creciendo. Para preservar la Tierra, el aumento necesita limitarse a no más de 1,5 °C por encima de niveles preindustriales. Así que las emisiones se tienen que reducir un 45% para 2030.
Para lograrlo, además de reducir las emisiones de CO2, hay que compensar las emisiones restantes con medidas de mitigación. Hablamos de acciones como la captura y el almacenamiento de carbono (CCS) o la plantación de árboles. En definitiva, el objetivo final de la neutralidad de carbono es evitar los peores efectos del cambio climático.
¿Quién, cuándo y por qué se planteó este reto de Net Zero?
Lo cierto es que el reto Net Zero lleva siendo una necesidad desde hace mucho tiempo. La idea de lograr la neutralidad de carbono ha sido promovida por la comunidad científica y los líderes mundiales (a través de la ONU, principalmente) como una forma de abordar el cambio climático y sus devastadoras consecuencias.
Uno de los eventos clave que contribuyó al surgimiento de la meta de neutralidad de carbono fue la firma del Acuerdo de París en 2015. En él los países se comprometieron a limitar la subida de la temperatura global a menos de 2°C por encima de los niveles preindustriales y reduciendo así las emisiones de gases de efecto invernadero.
En los últimos años ha habido mayor concienciación pública sobre los impactos del cambio climático y la necesidad de tomar medidas. Como resultado, una gran cantidad de empresas y organizaciones han adoptado la meta de la neutralidad de carbono como una forma de combatirlo.
¿Y qué es Net Zero 2050?
Para alcanzar esta neutralidad cero se han establecido objetivos tangibles. Retos con fechas concretas como Net Zero 2050 que se refiere a alcanzar la neutralidad de carbono para el año 2050. Esto significa que la cantidad neta de emisiones de gases de efecto invernadero liberadas a la atmósfera debe ser cero para ese año.
Así mismo, numerosos países, empresas y organizaciones de todo el mundo se han sumado al reto Net Zero 2050. Pero para ello se deben adoptar una serie de medidas que afectan especialmente a diversos sectores, como las que enumeramos a continuación:
– La transición a fuentes de energía renovables.
– La electrificación de las industrias y del transporte.
– La mejora de la eficiencia energética.
– La adopción de prácticas agrícolas y forestales sostenibles.
– La implementación de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono y de medición de CO2.
¿Cuál es la diferencia entre Net Zero y carbón neutral?
Tras leer sobre el tema pueden surgir dudas entre dos conceptos similares: Net Zero y carbón neutral. ¿Son o significan lo mismo? La respuesta es no, puesto que, aunque persiguen objetivos que sí son muy parecidos, tienen una diferencia notable. Mientras que Net Zero abarca todas las emisiones de gases de efecto invernadero, carbón neutral se centra exclusivamente en el CO2 generado por los combustibles fósiles.
¿Cómo conseguir el objetivo Net Zero carbón con la domótica?
Ahora bien, ¿cómo puede contribuir la domótica para edificios inteligentes a cumplir con el reto Net Zero? Siendo precisamente eso, edificios inteligentes y sostenibles. Para ello, desde la experiencia que hemos adquirido en Alfred Smart trabajando en proyectos de sostenibilidad, te vamos a citar varios dispositivos y aplicaciones de tecnología Smart con los que conseguir esta eficiencia energética.
La gestión energética inteligente
Los sistemas de gestión de energía inteligentes optimizan el uso de la energía en tu hogar o en edificios controlando la iluminación, la climatización, la ventilación y los electrodomésticos en función de tus necesidades y la actividad en el inmueble. Por ejemplo, con sistemas de iluminación inteligentes ajustas el brillo y la intensidad dependiendo de la luz natural disponible o de la ocupación de la habitación.
Sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado eficientes
Los sistemas de climatización inteligentes ajustan la temperatura y la ventilación en función de tus preferencias y el uso que se le esté dando a cada estancia de la vivienda o del edificio. Sin ir más lejos, termostatos inteligentes como éste de libre tensión ajustan la temperatura en función de la hora y la ocupación de la habitación.
Electrodomésticos inteligentes
Los electrodomésticos inteligentes funcionan en momentos de bajo consumo energético, como son las horas valle, según cómo los programes. Además, los controlas a distancia a través de una aplicación móvil, lo que te permite tener bajo control el consumo de energía y apagarlos cuando no estén en funcionamiento.
Monitorización del consumo de energía
Los dispositivos de monitorización del consumo de energía, como este medidor, te ayudan a entender mejor cómo se está utilizando ésta en tu hogar o edificio. De esa forma, puedes adoptar medidas para reducir el consumo innecesario y, en consecuencia, emitir menos gases de efecto invernadero.
En definitiva, la domótica y los edificios inteligentes ofrecen ventajas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en hogares y edificios. La razón es que optimizan el uso de la energía y fomentan prácticas sostenibles. En este sentido, como has visto, hay numerosos dispositivos inteligentes que contribuyen al reto Net Zero. No obstante, si quieres conocer cómo funcionan o implantarlos en tus edificios, solo tienes que decírnoslo.